La esteatosis hepática, también conocida como hígado graso (o FLD en inglés), es la forma más frecuente de esteatosis, no siempre se acompaña de lesión hepática debido a la gran capacidad funcional del hígado.
Se produce hepatomegalia y el hígado muestran gotas lipídicas que pueden ser de gran
tamaño y existir pocas o ser pequeñas y abundantes. La acumulación de triacilglicéridos en
unas u otras zonas del lobulillo hepático dependerá de la causa: en la
congestión hepática (que genera isquemia) los triglicéridos se acumulan preferentemente en el centro del lobulillo (esteatosis centrolobulillar) tal y como ocurre en la insuficiencia cardiaca, alcoholismo,
etc. La esteatosis perilobulillar es producida tras períodos
prolongados de ayuno. El hígado graso suele aparecer a
causa de la toma de grandes medidas de alcohol, azúcares o grasas.
CAUSAS
- Metabólico: Abetalipoproteinemia, enfermedad por almacenamiento de
glucógeno, enfermedad de
Weber-Christian, hígado graso
agudo del embarazo, lipodistrofia.
- Nutricional:
Desnutrición,
nutrición parenteral total, pérdida de
peso grave, síndrome de realimentación,
bypass yeyuno-ileal, bypass
gástrico, diverticulosis yeyunal con sobre crecimiento bacteriano
- Drogas y
toxinas: La amiodarona,
metotrexato,
diltiazem,
tetraciclina
expirada, terapia antirretroviral altamente activa, glucocorticoides,
tamoxifeno,
hepatotoxinas
medioambientales (por ejemplo, fósforo,
envenenamiento por hongos)
- Otros: Enfermedad inflamatoria intestinal,
VIH, la hepatitis C
(especialmente el genotipo 3), y la deficiencia de alfa 1-antitripsina.
TRATAMIENTO:
El tratamiento del hígado graso consiste fundamentalmente en bajar de peso y aumentar la actividad física. La obesidad
y el sobrepeso, los principales factores de riesgo, son modificables
mediante cambios en el estilo de vida. Otras recomendaciones incluyen
evitar el consumo de alcohol y el consumo de medicamentos innecesarios.
En aquellas personas que están en etapas más avanzadas de la enfermedad
(inflamación o fibrosis hepática importante), pueden usarse algunos medicamentos que pueden ayudar, como antioxidantes (vitamina E) o agentes sensibilizadores de la insulina. Dentro de este último grupo de medicamentos, destaca el uso de pioglitazona,
que ha demostrado beneficios normalizando las aminotransferasas y
mejorando la histología hepática.
En cuanto a los alimentos que se pueden consumir, estos son:
1. Cereales: Alimentos con carbohidratos de absorción lenta como los son los cereales integrales (pan integral, fideos integrales, cereales integrales sin azúcar, harinas integrales) y alimentos con índices glicémicos bajos como el arroz integral. Lo recomendable es consumir 3 a 10 porciones diarias.
2. Frutas: Consumir entre 2 a 4 porciones.
3. Verduras: Consumir verduras de hoja verde todos los días y verduras crudas en general en compañía del almuerzo y/o cena. 2 a 5 porciones al día.
4. Carnes: Consumir carnes magras como pollo, pescado, pavo y cortes de carne roja magra como la posta. En cuanto al huevo, se puede consumir muy bien la clara de huevo en preparaciones como tortillas o espumas. 1 a 3 porciones.
5. Lácteos: Consumir los lácteos 0% materia grasa, ya que la grasa de los lácteos es saturada y es muy perjudicial para el hígado. Las porciones diarias recomendadas son 2 a 4 porciones.
6. Aceites y grasas: Consumo restringido, prefiriendo aceites vegetales como el de oliva.
7. Azúcares: Por ningún motivo debemos consumir azúcares simples (azúcar de mesa, sacarosa), . Lo más recomendado es usar edulcorantes como sucralosa.
1. Cereales: Alimentos con carbohidratos de absorción lenta como los son los cereales integrales (pan integral, fideos integrales, cereales integrales sin azúcar, harinas integrales) y alimentos con índices glicémicos bajos como el arroz integral. Lo recomendable es consumir 3 a 10 porciones diarias.
2. Frutas: Consumir entre 2 a 4 porciones.
3. Verduras: Consumir verduras de hoja verde todos los días y verduras crudas en general en compañía del almuerzo y/o cena. 2 a 5 porciones al día.
4. Carnes: Consumir carnes magras como pollo, pescado, pavo y cortes de carne roja magra como la posta. En cuanto al huevo, se puede consumir muy bien la clara de huevo en preparaciones como tortillas o espumas. 1 a 3 porciones.
5. Lácteos: Consumir los lácteos 0% materia grasa, ya que la grasa de los lácteos es saturada y es muy perjudicial para el hígado. Las porciones diarias recomendadas son 2 a 4 porciones.
6. Aceites y grasas: Consumo restringido, prefiriendo aceites vegetales como el de oliva.
7. Azúcares: Por ningún motivo debemos consumir azúcares simples (azúcar de mesa, sacarosa), . Lo más recomendado es usar edulcorantes como sucralosa.